Boletín 74-2023
En el VI Congreso Regulatorio se abordó el rol de la innovación y el cambio tecnológico en la prestación de los servicios públicos regulados en los sectores de agua, energía y transporte.
En el sector hidrocarburos, en el marco del proceso de descarbonización de la economía, destaca el desarrollo de proyectos relacionados con el aprovechamiento de nuevas fuentes alternativas de energía que contribuyan a sustituir el uso de combustibles fósiles.
En este contexto, se posicionó la importancia de los biocombustibles en el proceso de transición energética, que contribuya a reducir las emisiones y enfrentar los efectos adversos del cambio climático. Asimismo, discusiones sobre los mitos y realidades del etanol, para mejor comprensión de la política pública que prevé la mezcla de gasolinas con etanol a nivel nacional.
El Intendente de Energía, Mario Mora, explicó el desafío que implica avanzar hacia un modelo de regulación más flexible y ajustado a los cambios que experimentan los mercados energéticos, marcado por un proceso acelerado de innovación y cambio tecnológico. La generación distribuida, el almacenamiento de energía, el funcionamiento de micro redes, la internet de las cosas, así como la movilidad eléctrica en todas sus modalidades, son una pequeña muestra de los múltiples cambios que están impactando el funcionamiento de los mercados energéticos.
En el sector eléctrico, destaca el posicionamiento de los beneficios asociados al desarrollo de micro redes eléctricas, en el marco del proceso de implementación de la Ley de Recursos Distribuidos. Asimismo, el proceso de gasificación a partir del manejo de residuos sólidos.
En el caso del agua, se aplican acciones para controlar y medir adecuadamente el servicio, como es el caso de la Asociación Comunal de San Rafael de Ojo de Agua, la cual colocó medidores inteligentes a todos los abonados del acueducto.
El Intendente de Transporte, Edward Araya, finalizó mencionando la importancia que tiene para el país que existan proyectos de innovación que están transformando los servicios de transporte pública e infraestructura como las normas nacionales de calidad.
ARESEP promueve el uso de normas aplicadas al transporte de personas para atender las necesidades y requerimientos de los usuarios, conocidas como INTE G20 e INTE G21.
El proyecto del sistema de pago electrónico (SINPE-TP) impulsado desde el 2017, se acerca al 10% de la flota de autobús que lo está usando, con un recaudo superior a los ¢11.500 millones. Este es un sistema universal y abierto para todos los operadores de transporte público.
Por otro lado, la ARESEP promovió estudios técnicos que permiten conocer las condiciones para el reemplazo de la flota de buses que utilizan diésel los eléctricos.
También se impulsa la aplicación de 8 normas nacionales de calidad para los servicios que se brindan en los puertos del país, siguiendo las mejores prácticas de España, lo que ha permitido estandarizar definiciones, servicios y normativas a aplicar en ambos litorales (Pacífico y Caribe).