ARESEP pide pagar solidariamente servicios públicos para garantizar continuidad

·       Usuarios deben acercarse al prestador para conocer opciones de pago

Boletín 16-2020, 3 de abril de 2020. La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) hace un llamado a la solidaridad de los usuarios para que paguen los servicios públicos de agua y electricidad, oportunamente.

Ante la crisis por el COVID-19, la Autoridad Reguladora muestra su preocupación por la sostenibilidad, continuidad y calidad de los servicios públicos que reciben los usuarios.

Ante esto el ente regulador alerta que al no cancelar la factura de agua y electricidad se pone en riesgo la continuidad de los servicios públicos, pues en este momento y dado la emergencia sanitaria, algunos operadores sufren una disminución en la demanda mientras otros reducen su nivel de ingresos como producto de una menor facturación. Esto factores están afectando su liquidez y capacidad financiera.

El Regulador General, Roberto Jiménez, señaló que “no pagar los servicios públicos básicos pone en grave riesgo la seguridad, salud y actividades económicas del país, con consecuencias gravísimas”.

La ARESEP hace un llamado a la solidaridad, y solicita a los usuarios que pueden pagar sus servicios públicos que lo hagan. En esta crisis por el COVID-19, es necesario mantener los servicios robustecidos, para garantizar el suministro a toda la población y prevenir la propagación del virus.

De igual manera, se le recuerda a quienes tienen inconvenientes para cancelar que se acerquen al prestador para conocer cuáles son las opciones que les ofrecen para el pago de los servicios públicos.

El Regulador General instó a las personas con capacidad financiera para que continúen pagando los recibos: “esta es una forma de ser solidarios con el país y con las poblaciones vulnerables, hoy más que nunca podemos demostrar esa solidaridad que nos caracteriza a los costarricenses. La medida de arreglos de pago es para quienes se han visto afectados económicamente por la crisis. No se debe afectar la prestación de los servicios públicos, ni su calidad; por eso debemos pagarlos”.

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