· Se evalúan 277 aspectos con el fin de reducir riesgos de incendio y seguridad humana.
· La seguridad es un derecho de los usuarios.
La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos analiza el riesgo de incendio en las Estaciones de Servicio del país, y revisa la infraestructura, equipo contra incendios, sistemas de seguridad, hidrantes, condición del sistema eléctrico, señalización.
Durante el segundo semestre del 2017 el Programa de Evaluación de riesgo de incendios y seguridad humana en estaciones de servicio inspeccionó 248 estaciones de servicio activas, evaluaciones que continúan en el 2018. En las inspecciones se evalúan 277 aspectos relacionados con la prevención de incendios y seguridad humana. Estos aspectos tienen diversos grados de peligrosidad, por lo que pueden ameritar correcciones urgentes.
Para realizar las inspecciones de seguridad la Autoridad Reguladora cuenta con el apoyo técnico del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Costa Rica.
Tomando como referencia las condiciones establecidas en el Decreto Ejecutivo 30131-MINAE, se evalúan 277 aspectos, los cuales se clasifican en cuatro categorías: “Grave” (es situación crítica y de corrección urgente), “Importante” (corregir y adoptar medidas de control), “Moderado” (mejorar si es posible) y “Tolerable” (no intervenir, salvo que un análisis más preciso lo justifique).
De las 248 estaciones inspeccionadas en el 2017, se identificaron 132 con situaciones de atención inmediata (53,2%). Estas situaciones corresponden a: fugas en surtidores, anomalías en el sistema de detección de fugas o en el interruptor de emergencia y ausencia de equipos portátiles de extinción.
La falla más preocupante es en los interruptores de emergencia, pues de presentarse un derrame, accidente, evento sísmico o acto vandálico, las estaciones se ven imposibilitadas de eliminar una probable fuente de ignición al no estar en capacidad de detener, de manera inmediata, el flujo de los combustibles.
El enfoque del proyecto es preventivo para garantizar la seguridad de usuarios, trabajadores, vecinos e inversiones que garantizan la prestación del servicio.
Cuando se detecta un problema que requiere atención inmediata, la Autoridad Reguladora lo comunica de inmediato y otorga un plazo de 72 horas para efectuar dichas correcciones (las cuales deben ser constatadas por un profesional competente). El proceso ha contado con el respaldo de las estaciones de servicio, tanto que el 92% de los casos se atendieron dentro del plazo establecido.
