ARESEP insiste en cambio de metodología de autobús

La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos insiste en que es urgente un cambio en la metodología de autobús para que sea más justa con los usuarios.

El modelo actual, que data de hace 20 años, ha pasado desde el 2011 por una serie de intentos de cambio, sin embargo no ha sido posible someterla al proceso de audiencia pública.

En el más reciente fallo dado por la Sala Constitucional -resolución 11101-2015-, mediante el cual se declaró sin lugar el recurso de amparo interpuesto por el Defensor Adjunto de los Habitantes Juan Manuel Cordero González, se habilitó a la ARESEP para que realice la audiencia, de tal manera que se reciban las posiciones a favor o en contra por parte de cualquier interesado.

La Defensoría de los Habitantes ha pedido un espacio para organizar dos sesiones de discusión de la propuesta. En ese sentido, el Regulador General, Dennis Meléndez consideró que las discusiones convocadas  son un espacio más para el análisis técnico, como el que realizó la ARESEP en enero y febrero de este año.

El Regulador manifestó que “durante los primeros meses del presente año, la ARESEP realizó un ejercicio similar al propuesto. Realizamos ocho sesiones de discusión regulatoria sobre la metodología tarifaria de autobuses, en la cual contamos con la participación activa y abierta de más de 900 personas; se realizaron presentaciones sobre cada uno de los temas sujetos a modificación en la nueva propuesta de metodología tarifaria; se entregaron documentos de discusión sobre la temática de discusión de previo a cada una de las sesiones“.

Uno de los aspectos más relevantes que requiere ajustarse en la metodología de autobús, es la depreciación. Actualmente, la depreciación es acelerada, pues el 80% del costo del autobús se paga en 4 años. Esto incide notablemente en la tarifa, las cuales deberían ser más bajas si el período de pago de los autobuses fuera mayor. Y lo más importante es que, esto no incide en la edad media de la flota del país, la cual depende de otros factores.

Consecuentemente, no es cierto que esta nueva fórmula esté diseñada para deprimir la actividad o envejecer la flota, y mucho menos afecta la calidad. Por el contrario, con la nueva metodología se dota a la Autoridad Reguladora de nuevos instrumentos para hacer cumplir los requisitos de calidad del servicio, para que haya un mayor control sobre el trato que se da a los pasajeros, el uso correcto de las unidades en la línea a que están asignadas, el cumplimiento de horarios y la información adecuada. Con la aprobación de este nuevo modelo ordinario de tarifas de autobús, mucho más robusto, transparente y con plena rendición de cuentas, los usuarios no solo pagarán menores tarifas en el mediano plazo, sino que, a corto plazo notarán una enorme mejora en la calidad del servicio.

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